La jornada fue momento de reunión, formación y envío de los y las jóvenes que han decidido confirmarse y han completado su proceso de acompañamiento catequístico desde inicio de este año. Este es uno de los momentos culmines del proceso de preparación sacramental y el envío formal de los y las confirmandos(as) para su Eucaristía final.

Participaron de esta jornada los jóvenes de M1 junto al equipo de Confirmación, el cual está compuesto por tres profesores, más 10 monitores voluntarios, de segundo a cuarto medio.

La jornada fue el viernes 21 de octubre de 12:30 a 19:00 horas en el Estadio Marista de Villa Alemana.

Esta jornada es uno de los hitos finales del proceso vivido todo el año en la preparación catequística entregada a los primeros medios, donde 59 jóvenes han decidido confirmarse luego de haber cumplido responsablemente el programada de formación teórica, reflexiva y práctica, entregado por el Colegio.

En esta jornada, los jóvenes, tienen la oportunidad, como nueva comunidad de confirmandos(as), de compartir un momento de recreación, reflexión y formación teórica, además de verbalizar claramente sus motivos de por qué quiere recibir el sacramento de la Confirmación y con ello vivir el envío final junto a diferentes detalles personales, espirituales y familiares.

“Cuando los y las estudiantes de M1 reciben la formalización de la formación pastoral en esta instancia, nos encontramos con estudiantes maristas en general, que tienen realidades personales y como cursos, pero cuando luego comienza lo sacramental y ellos(as) deciden libremente si deciden confirmarse o no, se comienza a construir una comunidad de jóvenes maristas y cristianos que quiere confirmar su fe y tienen consciencia de este camino” señala María Soledad González.

Esta jornada es fundamental para concluir temáticas aprendidas en el año, aplicar reflexiones varias, darse el tiempo de trabajo personal, pero también saber poner sus dones en son de realizar un buen trabajo grupal.

Por último, ellos reciben varios detalles que marcan no solo su formación, sino también su corazón, recordándoles que no estuvieron solos en este proceso, ni lo estarán, además, de lo orgullosa que se siente la comunidad estudiantil de su responsabilidad en el año vivido junto al Equipo de Confirmación.