La comunidad colegial se
reunió el domingo 6 de Junio para celebrar en torno a la
mesa del altar, la eucaristía, para agradecer a Dios y a
la Iglesia para habernos regalado a un santo en la
persona de Marcelino Champagnat, nuestro fundador.
Nuestro patrono murió justamente un día 6 de junio, hace
ya 170 años, en el año 1840, acompañado por el Hno
Francisco, quien tuvo la misión de anunciar la triste
noticia a los hermanitos que lo acompañaron en el inicio
de la que es hoy Congregación de los Hermanos Maristas.
En esta ocasión, presidió la Eucaristía el Padre
Ángel, quien lleva una larga presencia como capellán de nuestro
colegio y también un largo tiempo de servicio y amistad con los
hermanos de la congregación en Chile.
Recordar a Marcelino es recordar las miles de obras educativas
que se han fundado en los cincos continentes. Es recordar la
palabra y el ejemplo de muchos religiosos, es recordar la noble
tarea educativa de la que muchos hemos sido beneficiados.
Se inició con la Eucaristía, a la que asistieron las familias y
los distintos estamentos del Colegio, una nueva semana
Champagnat.